Como vas de autoestima
La autoestima es como una hucha. Si estás dispuesto a quererte, valorarte y aceptarte, irás recogiendo un poco de aquí, un poco de allá, aunque en ese momento no te haga falta, irás ahorrando autoestima para cuando la vida te haga experimentar fracaso, decepción, falta de confianza…Es entonces cuando tienes que acordarte de todo lo que has recogido en el camino, darte cuenta de que eres especial, que nadie te debe valorar y que tu valor no es comparable a nada, ir a la hucha de tus experiencias, afectos y aprendizajes, y coger un poco, lo suficiente para levantar tus hombros, mirar al frente y decir «YO VALGO»
Hay dos tipos de miedos en las personas:
El miedo racional nos protege, nos hace tomar precauciones ante un peligro, es necesario y útil para adaptarnos y seguir aprendiendo. Pero el miedo que abunda más en esta sociedad es el miedo irracional, el miedo al rechazo, al fracaso, al abandono, a no ser capaz, a defraudar, a no gustar, a ser inferior. Este miedo no surge de tu instinto de protección, sino de tu falta de autoestima, se forma en tu imaginación y se alimenta de tus pensamientos negativos sobre ti mismo, los demás y el mundo. Si se forma en tu imaginación, utiliza esta para vencerlo, imagínate fuerte, capaz, seguro/a, atractivo/a, grandioso/a, maravilloso/a y todo empezará a cambiar. ¿Sabes porque? Porque lo que la mente crea, la mente lo puede cambiar y «TU MENTE ES MARAVILLOSA»
¿En que tiempo vives, pasado, presente o futuro?
Cuando el pasado te pese como una losa y el futuro lo percibas inseguro y amenazante, acuérdate que lo único que puedes vivir es el presente, el aquí y ahora y con esos pensamientos estás dejando de hacerlo. Imagínate un perro cuando se moja y se sacude el agua con fuerza, haz lo mismo mentalmente y date cuentas de donde estás, que perciben tus cinco sentidos, que experimentas, que sientes y disfrútalo
¿QUE TE LO IMPIDE?
Y tú, Cómo vas de autoestima